La crianza positiva es un estilo de crianza basado en el respeto a los hijos. Se trataría en poner de base el amor en la crianza y, sobre todo, en hacerlo a través del respeto y la no violencia. Actualmente son numerosos los padres que entienden que la crianza de los hijos tiene que estar alejada de conductas violentas, sin embargo en numerosas ocasiones los padres necesitan orientación, apoyo y herramientas para gestionar los conflictos y retos que van surgiendo en la vida familiar para afrontarlos desde el respeto.

Es importante que tengamos en cuenta que cada familia tiene sus propias particularidades y necesidades, por lo que cada una debe hacer aquello que crea conveniente en cada momento. Quiero pensar que todos los padres quieren lo mejor para sus hijos y que ninguno de ellos va a hacer nada en contra de sus propios hijos.

Así mismo, tú que me estás leyendo es fundamental que estés bien. Mamá y papá tienen que estar bien para cuidar a su bebé y sino lo estáis tu bebé tampoco estará bien.

Cuídate tú para poder cuidar a los demás. Dicho esto, es importante que encuentres la forma en la que te sientes cómoda para criar a tus hijos. Habrás leído muchísimo durante ese proceso pero para mi es importante que conectes contigo misma e identifiques con qué te sientes coherente y cómoda. Si bien es cierto, la crianza en positivo está siendo la elección de todos aquellos que pretenden que los niños entiendan las consecuencias de determinadas acciones y comportamientos. Utilizando la empatía, la comprensión y el respeto, enseñan a hacer lo correcto utilizando un lenguaje positivo y muuucha paciencia. Evitando utilizar castigos desmesurados, amenazas, chantajes, etc.

La forma de educar siempre genera debate y, muchas opiniones enfrentadas. Tengamos en cuenta que los estilos y las técnicas pueden variar, pero en ningún caso se debe confundir con crianza permisiva. Es decir, no se trata de consentir todo sino de saber actuar para que no se comporten de una determinada manera. Los niños tienen infinitas maneras de sorprendernos dependiendo de su edad: objetos rotos, peleas con sus hermanos, primos o compañeros, paredes pintadas, lanzar objetos… por eso es importante que tengamos claras las pautas.

¿Qué es la crianza en positivo?

No existe una definición de crianza positiva universal. Leas el autor que leas, la crianza en positivo tiene como base  de la educación el cariño y el respeto.

La crianza positiva fomenta la relación entre padres e hijos basada en el respeto mutuo, es decir, tiene como objetivo ayudar a que los pequeños se desarrollen de forma saludable, y que además puedan relacionarse con los otros de forma no violenta.

Dentro de la crianza positiva existen unos puntos clave que es importante que tengamos en cuenta:

• Elogiar el buen comportamiento del niño.
• Escuchar, es decir prestar atención a tu hijo.
• Establecer normas y límites claros.
• Trabajo en equipo por parte de todos los miembros de la familia.
• No gritar, amenazar, chantajear y humillar a los niños.
• Comprender y corregir desde el respeto y no utilizando el castigo físico o psicológico.

En definitiva, la crianza en positivo pone al niño como individuo con derechos que se deben respetar.

La crianza en positivo educa a niños felices, desde el respeto y el amor hacía ellos. Pone en foco en fomentar y desarrollar sus habilidades y capacidades, para que se conviertan en adultos independientes, comunicativos, empáticos, con inteligencia emocional, etc. Desde este estilo de crianza los niños se sienten que pertenecen, que son valiosos y profundamente queridos.

Hay algunos aspectos que puedes poner en práctica desde hoy mismo para focalizarte en este estilo de crianza:

• Muéstrale tu amor y cariño.
• Presta atención y conoce al niño: sus inquietudes, sus capacidades, sus intereses… ten en cuenta que estás evolucionan en el tiempo.
• Comunícate con el niño y tenlo en cuenta. Fomentarás su sentido de pertenencia.
• Ponte a su altura cuando hables con él, aumentará su confianza.
• Muéstrale tu respeto. Si tú le respetas, él te respetará a ti.
• Fomenta su autonomía: al ser capaz de hacer las cosas por sí mismo aumentará y potenciaras su autoestima.
• Sé el espejo en el que quieres que se vea.
• Gestiona tus emociones, estarás siendo un fabuloso ejemplo.

Y… ¿Cómo pongo límites?

Es necesario destacar que, educar en positivo no es sinónimo de ser permisivo. Los límites son tan importantes como el cariño, constituyen la estructura que les da seguridad a los niños y los prepara para enfrentarse al mundo exterior.

Sin embargo, los límites han de ser consensuados con el niño y conocidos por todos. Tu hijo tiene que conocer el motivo del porqué de esas normas y participar en su establecimiento. De esta manera, se muestran mucho más involucrados en su cumplimiento.

Beneficios de la crianza en positivo.

Como has podido observar a lo largo del post, la crianza en positivo es un estilo de crianza educativo, más que una serie de pautas. Es decir, es una forma de enfocar la paternidad. Sin embargo, en función de tu historia personal y tus creencias previas va a resultarte más o menos sencillo llevarla a cabo. Recuerda que puedes solicitar ayuda. Este estilo de crianza ofrece múltiples beneficios:

• Buena autoestima: los niños desarrollan una buena autoestima y confianza en sí mismos. Han crecido sintiéndose amados y con sus necesidades emocionales cubiertas.
• Relaciones familiares armoniosas: ya que no se establecen luchas de poder y las relaciones son mucho más fluidas.
• Mayor empatía, inteligencia emocional y mejores habilidades comunicativas.
• Suelen ser niños más tranquilos y menos conflictivos: al ofrecerles respeto como base de la educación, los niños responden de la misma manera y no sienten la necesidad de estar a la defensiva. Se muestran más colaboradores con los padres y con los límites del hogar.
• Mayor responsabilidad: dado que hemos fomentado su autonomía se muestran más responsables y no tienen miedo a asumir retos. Esto es un aprendizaje vital para su vida adulta que les va a permitir hacerse cargo de su propia vida.

Por concluir, la crianza positiva va proporcionar una mejor calidad de vida a padres e hijos. Les va a permitir vincularse desde el amor, cariño y respeto mutuos. Sin embargo, para muchas personas les resulta complicado implementar este estilo educativo y es común que surjan numerosas dudas. Por ello, el apoyo a las familias en este proceso es fundamental. No dudes en contactarme para que pueda acomparte en este proceso. Estoy plenamente convencida que tú y tu familia lo agradeceréis.